Jonathan Alexander España Eraso. (Pasto, Nariño, Colombia; 1984). Licenciado en Filosofía y Letras. Especialista en Estudios Latinoamericanos. Ha publicado cuentos, textos poéticos y ensayos en publicaciones impresas y virtuales, tanto nacionales como internacionales. Co-fundador y co-editor de la Revista Cultural Avatares, editada en Pasto, Nariño. Dirige el suplemento cultural, bajo el sello editorial Avatares, La conjura de los necios.
A Víctor Luna, por la amistad, el don.
Llega el tiempo de la escritura,
de su apertura,
de su devenir.
Mientras la página es la combustión de las palabras,
la retirada del fuego deja su oportunidad a lo que llega.
Es el fin de lo representado.
Ahí lo escrito se consume y la ceniza
aparece desde los márgenes como un soplo.
Y se traza un espaciamiento para lo que adviene sin una memoria de sí.
El don de la ceniza busca generar otro don: el de un acontecimiento sin horizonte, que ningún otro horizonte puede anunciar.
Tal es la gracia que promete la escritura en su trasegar sin-lugar.
Porque la escritura atraviesa los espacios y deja su rastro,
se inscribe como escritura de paso, en el instante del resplandor.
Por eso tiene como posibilidad la de arder siempre,
lo que quiere decir que en toda escritura hay ya ceniza.
Esa ceniza son las propias palabras,
su color negro,
su invención,
su silencio.
Así entendida se trata de una ceniza en el origen de la escritura,
de una purificación incendiaria de lo que se va escribiendo,
en una intensidad de relámpago blanco,
entre la memoria y la hoguera,
que es el espacio crepitante de la página
donde se crea el mundo.